Era el 12 de Febrero de 1853, fecha exacta en que el caserío se transformó en la florecienre ciudad de Puerto Montt. Ese día, escribiría más tarde Pérez Rosales en su "Informe" Gubernamental:
"Se habían reunido más de dos mil personas venidas principalmente de las Islas. Las banderas ondeaban al aviento en todos los sitios de la futura ciudad. El párroco de Ancud, don Miguel Sevila, bendijo la primera piedra dl Templo que se erigió al Altísimo. Acto continuo todos los colonos alemanes entonaron un himno de gracias al Creador, mientras el cañón de la "Janequeo" hacía resonar, por primera vez".
Por su parte el comandante de la "Janequeo" fue más explícito en la "parte" a la Comandancia General cuando escribió:
" Todo el día 11 lo ocupé ayudándole en la delineación de las calles, en ponerles nombres y preparar las cosas precisas para una solemnidad que creo ser la primera de esta naturaleza que se ha visto en nuestra patria; hice desembarcar la artillería y colocarla en la playa; habiendo hecho construir al efecto un prqueño fortín, improvisé una tienda de campaña, la adorné con el pabellón de Chile y de otras naciones, y concluí por ordenar a la oficialidad, tropa y tripulación de mi mando, que estuviesen de parada al amanecer del 12 y esperacen mis órdenes.
El día 12, al amanecer el sol en el horizonte, hice desembarcar la tropa y tripulación armada, y al izar el pabellón nacional, una salva de 21 cañonazos anunció a la multitud de personas que habían afluido a este punto, antes desierto, que en el día de nuestra independencia inaugurada en Chacabuco, se instalaba un puerto en Chile que habría su suelo virgen a la inmigración alemana y que recibía por nombre el del Supremo Jefe de la República, que tanto ha contribuído con su celo a la realización de esta gran idea".
Terminada la ceremonia, marchamos al lugar de donde habíamos salido; el Agente dio a todos las más expresivas gracias a nombre del Señor Presidente de la República y concluyó invitándonos a almorzar bajo una carpa a orillas del mar.
Simultáneamente el Agentede la Colonización daba cuenta del mismo hecho al Intendente de Chiloé, José Castillo, con el siguiente texto: "levantado el plano de la localidad y calculado convenientemente, se procedió a trazar en el terreno las calles y la plaza. La plaza ocupa la medianía del arco que constituye la figura del terreno y está abierta al mar".
Fuente: PUERTO MONTT
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